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Sabbath Bible Lessons

“En sus bocas no fue hallada mentira”

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Lección 10 Sábado, 8 de diciembre de 2007

Hablando en Público para la Gloria de Dios

“Las palabras de los sabios son como aguijones; y como clavos hincados son las de los maestros de las congregaciones, dadas por un Pastor” (Eclesiastés 12:11).

“Lo que se necesita, no son predicadores elocuentes, sino obreros humildes y fervientes, hombres que tengan una confianza infantil en un poder superior. Los hombres de oración, los que buscan al Señor con corazón contrito y humillado, son los hombres de poder.” –La Voz: Su Educación y Uso Correcto, pág. 313.

Lectura adicional:   Testimonios Para los Ministros, págs. 341–345. 
  Testimonies, tomo 3, págs. 419–424. 

Domingo 2 de diciembre

1. PRESENTANDO LA VERDAD CON AMOR

a. ¿Cómo podemos anular el prejuicio y la oposición al presentar el mensaje de la verdad? 1 Pedro 3:8, 9.

“El Espíritu de Jesús debiera empapar el alma del obrero. Son las palabras agradables y de simpatía, la manifestación de amor desinteresado por sus almas, lo que romperá las barreras del orgullo y del egoísmo y mostrará a los incrédulos que poseemos el amor de Cristo.” –El Evangelismo, pág. 462.

b. ¿Cómo deberían presentarse desde el púlpito las verdades impopulares? Efesios 4:15 (primera parte).

c. ¿Qué precauciones deben tomarse para no irritar a los que estamos intentando reformar? Judas 21–23.

“Mis hermanos, quebrantaos y arrepentíos de corazón. Que las expresiones de simpatía y amor, que no ampollan la lengua, fluyan de vuestros labios.” –Comentario Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de White], tomo 3, pág. 1182.


Lunes 3 de diciembre

2. DESARROLLANDO UN PERFIL

a. ¿Qué clase de perfil, con una secuencia lógica de ideas, es necesario en cualquier presentación de la verdad? Isaías 28:10.

b. ¿Por qué la cantidad de ideas en una presentación debería ser limitada? Eclesiastés 12:11, 12.

“La verdad debiera ser presentada punto tras punto. Deben hablarse en forma inteligible y con una pronunciación clara, destacando pocas cosas esenciales; entonces será como un clavo fijado en un lugar seguro, por el Maestro de obra.” –La Voz: Su Educación y Uso Correcto, pág. 236.

“[Los ministros] perjudican la obra, perjudican el efecto de la verdad que ellos defenderían, cuando sobrecargan tanto un discurso y presentan tantas cosas a la vez que la mente de los oyentes no siempre puede apreciar, ni seguir. Tendrían más éxito en sus labores si trataran de fijar uno o dos puntos en la mente de los oyentes, que sean puntos de vital importancia instándoles e insistiendo en el peligro de rechazar la luz acerca de esos puntos. Que los oyentes comprendan claramente la fuerza de cada punto, exhortándoles a tomar una decisión.” –Ídem., pág. 239.

“Cuando un ministro arroja un montón de conceptos ante la gente para que ésta los recoja y los ponga en orden, sus esfuerzos se han perdido, porque hay pocos que harán tal cosa.” –El Evangelismo, pág. 471.

c. ¿Por qué nuestros sermones, lecciones y oraciones deben ser cortos y al punto? Eclesiastés 5:2 (última parte); Mateo 6:7.

“Muchos cometen en su predicación el error de no detenerse cuando el interés está en su punto más alto. Siguen adelante en su perorata, hasta que el interés que se ha despertado en la mente de los oyentes muere, y la gente esté realmente cansada de palabras que no tienen peso, ni interés especial. Deténgase antes de llegar a ese punto. Deténgase cuando ya no tenga nada de especial importancia que decir. No siga adelante con palabras áridas, que sólo levanten el prejuicio y no suavicen el corazón. Usted desea estar tan unido a Cristo, que se dirija al alma con palabras enternecedoras y consumidoras. Las palabras puramente prosaicas o tediosas son insuficientes para este tiempo. Los argumentos son buenos, pero puede haber exceso de argumentación y demasiado poco del espíritu y la vida de Dios.” –La Voz: Su Educación y Uso Correcto, págs. 276, 277.


Martes 4 de diciembre

3. SENCILLEZ Y CLARIDAD

a. ¿Por qué es inútil presentar discursos intelectuales en lugar de hacer simple el plan de la salvación? 1 Corintios 1:21–25.

“Cristo ilustraba sus lecciones tan claramente que los más ignorantes podían comprenderlas fácilmente. Jesús no empleaba palabras largas y difíciles en sus discursos; usaba un lenguaje sencillo, adaptado a las mentes de la gente común. En el tema que explicaba no iba más lejos que hasta donde podían seguirlo.

“Los predicadores deben presentar la verdad de una manera clara y sencilla. Hay entre sus oyentes muchos que necesitan una clara explicación de los pasos requeridos en la conversión. La ignorancia de las masas en lo referente a este punto es mayor de lo que se supone. Entre los universitarios, oradores elocuentes, estadistas capaces, hombres de altos cargos de confianza, hay muchos que dedicaron sus facultades a otros asuntos, y descuidaron las cosas de mayor importancia. Cuando los tales forman parte de una congregación, el predicador pone a menudo a contribución todas sus facultades para predicar un discurso intelectual, y deja de revelar a Cristo. No demuestra que el pecado es la transgresión de la ley. No presenta claramente el plan de salvación. Podría haber conmovido el corazón de sus oyentes mostrándoles a Cristo muriendo para poner la redención a su alcance.” –Obreros Evangélicos, págs. 178, 179.

b. ¿Cómo podemos hacer para que nuestro tema sea bien definido, fervoroso y claro? 1 Corintios 1:5.

“Si usted tiene la gracia estimulante de Cristo para impartir energía a sus movimientos, pondrá fervor en sus sermones. Su tema será claro y estará bien definido en su mente. Sus observaciones no deben ser largas, ni tampoco debe hablar con vacilación, como si usted mismo no creyera lo que dice. Debe vencer cualquier vacilación por pequeña que sea, y los movimientos lentos e indecisos, y aprender a ser un hombre preciso.” –La Voz: Su Educación y Uso Correcto, pág. 238.


Miércoles 5 de diciembre

4. DESPERTANDO LA ACTIVIDAD MENTAL

a. ¿Qué lección podemos aprender de Cristo en hacer que los oyentes estén despiertos e interesados durante nuestros discursos? Lucas 2:46.

“Si en lugar de predicarles [a los padres e hijos], el orador tratara de enseñarles haciendo preguntas y hablando en un tono conversacional, las mentes serían despertadas a la actividad, y el público podría entender más claramente las verdades abiertas ante ellos. Su comprensión se apoderará de la realidad viviente de las verdades necesarias, para alertar la percepción creciendo en conocimiento.” –La Voz: Su Educación y Uso Correcto, pág. 260.

b. ¿Qué temas deberían presentarse para estimular el pensamiento y llevar las almas a una decisión a favor de Cristo? Hechos 16:30, 31; Colosenses 1:25–28.

“Elimine de su programa los sermones que no iluminen el alma, que no respondan a la pregunta: ‘¿Qué debo hacer para ser salvo?’ Predique el mensaje de prueba del tercer ángel. Es esencial que nuestros predicadores prediquen la verdad que tiene una conexión con el mensaje para este tiempo, y que presenten los temas en la forma más sencilla. ‘Qué debo hacer para ser salvo’, y ‘la justicia de Cristo’, son temas de vital importancia para la gente.” –La Voz: Su Educación y Uso Correcto, pág. 364.

“Es conocido en el cielo cómo representamos a Cristo ante el mundo. Son conocidas qué impresiones dejamos en aquellos a nuestro alrededor. Todas nuestras palabras y acciones están escritas en los libros del cielo. Entonces, cuán importante es que revelemos el hecho que hemos estado con Jesús, y aprendido de Él. ¿Nos complaceremos en una conversación liviana y trivial, los que profesamos conocerle? Oh, no permitamos a nuestros labios proferir aquello que será una piedra de tropiezo para los que observan a fin de ver qué beneficio hemos recibido de nuestra fe en Cristo. Más bien, elevemos sus mentes para meditar sobre las realidades eternas. Cuando nos mezclemos con la gente en el mercado, cuando caminemos por la calle, o dondequiera que estemos, asegurémonos de que tenemos una conexión viviente con Dios, y que representamos el carácter de Cristo ante el mundo.” –The Bible Echo and Signs of the Times, 15 de febrero de 1892.


Jueves 6 de diciembre

5. PREDISPOSICIÓN PERSONAL

a. ¿Cuál es el factor más importante al preparar un sermón o una presentación de Escuela Sabática? Efesios 6:18, 19.

“Se dedica muy poco tiempo a la oración secreta y a la meditación en las cosas sagradas. El anhelo de los siervos de Dios debiera ser recibir la santa unción, y estar revestidos con la salvación, para que lo que predican pueda alcanzar los corazones.” –La Voz: Su Educación y Uso Correcto, págs. 239, 240.

b. ¿Qué prerequisito debe ser cumplido por alguien antes de que esté preparado para enseñar o predicar? 1 Timoteo 4:16.

“No es suficiente argüir en defensa de la verdad. La evidencia más eficaz de su valor se ve en una vida piadosa; sin esto las afirmaciones más concluyentes carecerán de peso y de poder persuasivo, pues nuestra fortaleza radica en estar relacionados con Dios por su Espíritu Santo, y la transgresión nos separa de esta sagrada proximidad a la Fuente de poder y sabiduría.” –Comentario Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de White], tomo 2, pág. 992.

“Predicar lo que no practicamos, no es sino confirmar a los pecadores en su impenitencia. Las exhortaciones fervientes para andar en la luz, serán desatendidas, si el predicador mismo descuida seguir la luz que Cristo le ha dado.” –La Voz: Su Educación y Uso Correcto, págs. 331, 332.


Viernes 7 de diciembre

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL

1. ¿Qué métodos podemos usar para anular el prejuicio entre nuestros oyentes?

2. ¿Cómo podemos hacer para que nuestras presentaciones sean lógicas y secuenciales?

3. ¿De qué maneras prácticas podemos ser maestros más eficaces de la verdad?

4. ¿Por qué un método interactivo, con preguntas y respuestas, produce mejores resultados al enseñar?

5. ¿Qué es necesario para una presentación eficaz de la verdad?

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